El control biológico en primavera facilita la protección frente a plagas en el próximo ciclo de invierno
Koppert consolida en tiempo récord su amplio catálogo de flora auxiliar por la diversidad de plantas disponibles y por el asesoramiento a medida
En la campaña agrícola que acaba de finalizar, ha crecido exponencialmente el interés de los agricultores por el uso de plantas auxiliares para reforzar la protección de sus cultivos frente a las plagas. Esta tendencia ha provocado que Koppert multiplique en tiempo récord las ventas de su amplio catálogo de plantas reservorio para interior y exterior, tanto por la diversidad de especies vegetales que comercializa, como por su excelente asesoramiento a medida. “Nosotros aconsejamos al agricultor, basándonos en nuestra experiencia de más de veinte años con plantas auxiliares, y le decimos cuáles son las especies que mejor se adaptan a sus necesidades, en función de si busca crear un reservorio dentro del invernadero o de si prefiere colocar un seto vegetal en el exterior, a modo de barrera”, explica Juan Carlos Rodríguez, director comercial de Koppert en la zona de Almería, Granada y Málaga.
Actualmente, Koppert ofrece un amplio catálogo de flora auxiliar y plantas refugio en el que se incluyen diferentes especies seleccionadas con el objetivo de garantizar floración durante todo el año. El departamento técnico de Koppert ha dado máxima prioridad a la actualización constante de este catálogo. Tanto es así, que las especies seleccionadas van cambiando según la época del año, así como las presentaciones comerciales. La mayoría de estas plantas se comercializan en formato de plántula joven, lista para ser trasplantada, en bandejas de semillero con diferentes medidas.
Apoyo al control biológico
Las plantas reservorio y setos son una medida de prevención y un apoyo al control biológico de plagas. Estas plantas actúan como hospedantes, atraen a insectos beneficiosos donde pueden alimentarse, vivir y reproducirse. Para crear una biodiversidad en equilibrio, Koppert ha seleccionada plantas autóctonas que están muy adaptadas a nuestro entorno, suelos y condiciones climatológicas. Todas las especies vegetales seleccionadas son de fácil mantenimiento, con diferente porte y masa foliar y con diferentes periodos de floración para asegurar una floración escalonada durante todo el año.
La creación de un seto o barrera vegetal, colocado en el perímetro exterior de los invernaderos o en cultivos al aire libre, ayudará a cuidar el entorno y proteger el cultivo desde fuera favoreciendo, tanto en cultivos ecológicos como de manejo integrado, un control preventivo de plagas y enfermedades.
El catálogo de plantas auxiliares de Koppert también incluye las conocidas Plantas Bankers, que son aquellas plantas que se encuentran ya infestadas por una plaga y actúan como alimento alternativo para los enemigos naturales. En este caso, suelen ser plantas jóvenes de cereal, como Aphibank, un sistema de plantas de cereal que incluye 500 pulgones de Rhopalosiphum padi para atraer a depredadores y parasitoides que nos ayuden a combatir otros pulgones pequeños como Myzus sp; Aphis sp, Chaetosiphon fragaefolii etc. Otra de las opciones es Ervibank, un sistema de plantas de cereal que incluye 500 pulgones de Sitobium avenae para atraer a depredadores y parasitoides que nos ayuden a combatir otros pulgones grandes como Macrosiphum euphorbiae, Aulacorthum solani, etc.
Desde Koppert se valora muy positivamente el creciente interés por el uso de plantas refugio, ya que demuestra que tanto los técnicos como los agricultores están plenamente convencidos de la necesidad de crear islas de biodiversidad en las fincas. “Se persigue un doble objetivo, ya que con el uso de estas plantas refugio se evita que los insectos beneficiosos lleguen a desaparecer por falta de alimento durante ciertas épocas del año, al mismo tiempo que se facilita la presencia espontánea de otros enemigos naturales de las plagas”, añade Juan Carlos Rodríguez. “Sin duda, el sector agrícola de invernadero está demostrando en este momento que vuelve a estar a la altura de las circunstancias al reaccionar positivamente y en su conjunto para gestionar el control de plagas de forma sostenible y con métodos biológicos acordes a las nuevas exigencias comunitarias”, concluye Rodríguez.
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