El municipio de Enschede empezó a utilizar nematodos por primera vez en la primavera de 2021 para intentar frenar la propagación de la oruga procesionaria del roble. La zona urbanizada del municipio cuenta con un total de 22.000 robles. En el pasado, el ayuntamiento sólo extraía los nidos. Pero, como explica Petra Klein Breukink, no era suficiente. Ella es la responsable del proyecto de la oruga procesionaria del roble para el municipio de Enschede. Utilizamos Entonem, el producto de Koppert a base de nematodos, en lugares donde encontramos un rango de mariposas y polillas inusuales. Como sólo lo hacemos en una fase temprana, no hay efectos secundarios en otras orugas. Hemos tratado con nematodos entre 2.600 y 3.000 robles en total".
Mantenimiento de la biodiversidad
El municipio también utilizó trampas de feromonas el verano pasado para determinar cuántas polillas de la procesionaria del roble seguían presentes en las zonas donde se habían utilizado distintos métodos de gestión. Con esa información, y en función de las molestias que experimentemos, podremos decidir si ampliamos el uso de nematodos en las temporadas siguientes", explica Klein Breukink. Pero, como ya he mencionado, los beneficios de la planificación y el mantenimiento de la biodiversidad son ganancias importantes".