Polinización natural
Polinización natural
En 1988, se descubrió que el abejorro era el mejor polinizador de tomates, debido a su técnica única de polinización del zumbido. Antes de este descubrimiento, los tomates se polinizaban manualmente, una operación muy intensiva y menos eficiente. En el plazo de tres años, el uso de abejorros en tomates se convirtió en una práctica habitual en todo el mundo. A partir de 1993, se ha ido comprobando la eficacia de los abejorros en otros cultivos, demostrando sus beneficios como polinizadores comerciales. Actualmente, la polinización con abejorros se aplica en más de cien cultivos distintos en todo el mundo..